viernes, 13 de diciembre de 2013

Hipertermia regenerativa






“Dadme una fiebre y curaré cualquier enfermedad”, Así se refería Hipócrates, padre de la medicina occidental a la hipertermia. Parte de sus tratamientos eran el termalismo y las piedras calientes, con la finalidad de aumentar la temperatura del cuerpo y así activar los procesos regenerativos del mismo.
Sabemos que si elevamos la temperatura corporal por sobre los 43°C se rompen las membranas citoplasmáticas provocando la muerte celular debido al calor asociado, que de acuerdo a las leyes de la termodinámica acelera las moléculas que la componen tendiendo hacia el desorden de la materia –entropía-.
Este ha sido hasta ahora el límite de la temperatura en el cuerpo humano, ya que siempre ha estado asociada al calor y sus efectos físicos entrópicos. Sin embargo, la tecnología evoluciona y hoy contamos con el equipo de hipertermia INDIBA, que es capaz de subir la temperatura sin generar calor.
Este es el secreto de los deportistas de elite, que se lesionan, operan y a las 3 semanas están nuevamente compitiendo. Pero sus aplicaciones son muchas más, no sólo se tratan tejidos musculares y oseos, sino que también trabaja directamente órganos. En Japón, donde este equipo es ampliamente usado, regeneran  y desintoxican órganos afectados que la medicina alopática no ha podido mejorar, tales como el hígado y los riñones.
INDIBA es un equipo de radiofrecuencias profundas –a diferencia de los equipos cosméticos que son superficiales- que funciona en base a corrientes capacitivas y resistivas.
En Santiago, esta terapia está disponible en el Centro de Terapias Complementarias AmaneSer de la Escuela Internacional de Medicina y Cultura Oriental EIMCO , ubicado en Los Leones 877. Fono 2415 1010 – 2494 0722
Consulte por diversas aplicaciones.

1 comentario:

  1. Mucha suerte en este emprendimiento, felicidades en el año que se inicia.

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